Esa casita con jardín en el centro
Es verano, los jardines abren hasta las ocho y estos árboles esconden un tesoro regio: la Real Sombra.
Éste jardín es un Edén, señoras, señores: tiene pavos reales; césped que sólo pisan ángeles; golondrinas de vuelo rasante; paseos entre castaños; luz de hace un par de siglos.
Una parte es afrancesada, en plan Versalles, con el Palacio Real al fondo, más o menos como si tu fueses un emperador y aquella tu residencia de verano. El resto es paisajismo romántico: árboles y ramas desordenadas, un decadente reino vegetal perfecto para curar la resaca del domingo o leer un libro el lunes.
Recuerdo cuando descubrimos este lugar, los exploradores más torpes. Años habitando el centro de esta ciudad y nunca se nos ocurrió que había un paraíso allí, tan cerca de la plaza de España y al pie del Palacio. Porque, aunque está cerca, todas las puertas están cerradas menos una, que es precisamente la más lejana. Hay que bajar donde el Manzanares- ese río que en aquel antonces nunca recordaba nadie.
Allá en un lado estaba “El bosquete del Panchito”. Había una jaula abandonada, con un tronco dentro. ¿Y quién sería Panchito? Pensamos que sería un culebrón. O un oso. Hasta que encontramos a Panchito. Es un pato, con un modo bastante grosero de volar hacia y sobre tu cabeza.
Campo del Moro, Paseo Virgen del puerto s/n | 914 548 800
Horarios: De octubre a marzo, L-D 10:00 h-18:00 h. De abril a septiembre L-D 10:00 h-20:00 h
Precios: Gratis
*Publicado 19 febrero 2012, actualizado junio 2016
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