Nota: Este teatro ha cambiado de compañía en diciembre del 2012. Ahora se llama Teatro del Arte y se dedicará a teatro contemporáneo. Por su parte, la compañía de Angel Gutiérrez mantiene la misma web, Teatro Chejov y se ha trasladado a Mártires de la Ventilla 68.
Una casa de muñecas, donde los personajes de Chejov podrían charlar alrededor del samovar.
La obra a la que fui no me convenció, pero habrá que darle, no otra, sino mil oportunidades. Un teatro con ese nombre las merece. Y también Angel Gutiérrez, su director, que fue uno de los niños exiliados a Leningrado, en 1937, durante la guerra civil. Y residió y trabajó 37 años en la URSS, siempre en el teatro.
Cuando pienso en Chejov, pienso siempre en Carver, como le ocurrirá a todos los que hayan leído Un sendero nuevo a la cascada: Son poemas póstumos de Carver que dejó alternados con textos de Chejov. Los poemas son luminosos, pero siempre los textos de Chejov brillan más, y Carver lo sabía. Me gusta esa última humildad al morir, y la aceptación del maestro.
De cuya delicadeza participa este teatro. Antes de entrar a la sala del escenario, hay dos saloncitos con lámparas rojas, fotografías de Chejov, un piano y sillas isabelinas. Parecería que sus paredes están empapeladas de palabras. Masha, Nina, Nadia, Gurov, Ivanovna, Sergeyevna, Konstantín… Rusia en Madrid
Hablaron de albondiguillas, de chuletas, diversas sopas y salsas, y el cocinero, que lo recordaba todo muy bien mencionó platos que ya no se preparaban; había uno, por ejemplo-un plato hecho con ojos de vaca, que se llamaba “al levantarse por la mañana”.
Anton Chejov, Los campesinos, en Un sendero nuevo a la cascada.
Teatro Chejov, San Cosme y San Damián, 3 | 91 527 09 54
Horarios: Consultar Programación
Precios: Entrada 12-15 €
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