Huelga General 14N

Ayer fue la segunda huelga general del año. La anterior fue en primavera, el 29 de Marzo.

El vídeo describe un recorrido por el centro de Madrid en la mañana de la Huelga, y otro por la tarde-noche, en la manifestación desde Atocha a Colón. La música del vídeo es una versión original de la época de la canción “Ya hemos pasao” de Celia Gámez, en respuesta al “No pasarán” republicano. La versión proviene de la BSO de la película ‘Canciones para después de una Guerra’, de Basilio Martín Patino – de ahí los sonidos bélicos intercalados con la música. “Pichi” es la segunda canción. También de Celia Gámez.

Ésta es la cara B de la huelga anterior, en el casi invernal noviembre. Es importante lo de las estaciones, porque tocaba estar en la calle, pero no hizo ningún frío. Al contrario que en días anteriores, la temperatura era suave. Y la luz muy particular, el cielo jugaba entre luz y oscuridad, ofreciendo un espectáculo interesante. Se lucía como una vieja actriz coqueta, pues no en vano los pintores discuten sobre el cielo de Madrid.

Hubo quien hizo huelga, hubo quien hizo semihuelga, hubo quien tuvo un día normal.

Yo salí a dar una vuelta en bicicleta y disfrutar de los comercios vacíos y las persianas cerradas. No es habitual que la ciudad nos regale así su silencio.

En la plaza de Santa Ana me encontré un picnic, a los pies de García Lorca. Bien: parte de importante de la huelga era no consumir. Era muy alegre, con niños y libros, todo muy alejado del tradicional piquete… Pero igualmente nos avisaba de que era un día diferente. Y que tocaba tomar partido. Al menos reflexionar sobre el por qué de ese día de huelga.

En la CNT con el Puño en Alto

El que me centre en esta idílica estampa de gente leyendo y merendando, no significa que niegue la necesidad de la violencia. Quien no llora no mama, y los derechos nunca los regalan, hay que tomarlos con lucha. Bien lo sabe Madrid. Me fijo en su belleza, en su cielo y sus edificios, pero se que esa belleza está edificada sobre sangre (y no sobre agua como dice su leyenda). Lo bello no es sino el comienzo de lo terrible, dice Rilke en la primera de sus Elegías.

La vigilancia y el castigo esperan a nuestro alrededor y el vídeo da fe de ello. La calle estaba tomada por policías, sobre todo en las puertas de dos grandes empresas, El Corte Inglés y Zara. Y en el cielo navegaban desde la noche anterior helicópteros.

Iconos sencillos que simbolizan una violencia mucho más importante: la desaparición de lo público, la educación pública y la sanidad pública.

Muchos no le darán importancia hasta el día en que su venerada empresa (a quien confundían con su familia gracias a cuidadas estrategias de comunicación interna) les deje en la calle. Se sorprenderán al ver que pasados tres meses en paro han perdido su derecho a sanidad pública. Cómo es posible, dirán, yo he pagado mi seguridad social religiosamente durante años… Ah, puede usted solicitar su  tarjeta sanitaria de segunda clase, se llama de “personas sin recursos económicos suficientes”. La misma tarjeta sanitaria que tiene ese pobre de la esquina, con el que jamás pensaste compartir suerte. Sí, amigo, en tres meses pasaste de ser lo más, a ser lumpen. Ve a ver que tal te tratan con esa tarjeta en los hospitales privatizados.

… Solo era por poner un ejemplo.

No creo en esta cultura del miedo. Si te despiden que les den: hay vida fuera de tu empresa, y tu vida te está esperando. El miedo es basura mental, ruido, no te deja vivir el goce de la existencia.

La Huelga no es el no va más de las soluciones.

Seguramente sean muchas, el 15M, por ejemplo, no ha muerto. Sigue muy vivo en Madrid: El Mercado de San Fernando, ¡Esta es una plaza!, Embajadores con Provisiones, Esto no es Berlín, Tabacalera, El Patio Maravillas, La Morada, El Campo de la Cebada, Toma los barrios etc… Esta huelga el 14 N no ha sido más que una puntuación, en una frase más lenta y más fructífera.