Clara Montoya expone SINNI en la galería Slowtrack de Madrid hasta el 28 de Marzo.
Esto es una entrevista y también una visita guiada por la exposición de mano de la artista.
¿Cómo surgió Cloth-Clocks? ¿Cual es su papel en SINNI?
En Sudáfrica estuve una semana encerrada en una residencia, en Nirox, antes de poder ir a Johanesburgo. Al estar allí aislada sentí que todo era igual que lo que había conocido, pero diferente en los detalles. Esta es una de las capas de SINNI, estar en un sitio y estar en otro.
La parte del engranaje está oculta, y así lo que se ve es solo el ensueño. Sinni quiere decir compañero de viaje. El arte es el compañero de viaje, todo el arte: las letras, la poesía, la música.
Mi idea era hacer un reloj. Pensaba en dos artistas: Morandi y Román Opalka. Morandi pintaba botellas y botes con luces diferentes, Opalka hacía cuadros con números intentando atrapar el tiempo. Morandi me parece juguetón y abierto, Opalka más doloroso. Mi idea del reloj fue degenerando, el reloj se volvió un dibujo por capas. La unión la haces tu, el espectador, con lo que ves y lo que no.
¿Con lo que no ves?
Sí, influye en lo que ves. Si de los siete colores ves tres y luego el dibujo, vas a pensar en ese dibujo con esos tres colores. Cada espectador sumará un todo distinto. También la relación entre los cinco Cloth-Clocks cuenta: son cinco piezas iguales con contenidos similares pero diferentes. La combinación entre ellas genera otra capa.
¿Cómo llegaste a idear el mecanismo?
Fue un proceso largo. La idea en sí es de hace siete años. Lo intenté hacer hace dos años y funcionaba, pero no lo bastante para que la pieza viajase sola. Finalmente encontré esta solución, pero aun llevó tiempo realizarlo, probarlo… Es un esfuerzo pero me produce placer: hacer cosas que me gustaría ver. Como no existen las hago.
¿Cuál fue el criterio en la elección de colores?
Cada pieza tiene siete colores y un dibujo. Hay colores “bonitos” y “feos”, oscuros y claros. Busqué combinaciones que, sin ser rocambolescas, no irían normalmente juntas.
El complejo mecanismo de los Cloth-Clocks | Tres Cloth-Clocks en lentísimo movimiento
SINNI tiene dos atmósferas divididas en dos salas. Atravesamos la galería y vamos a la sala del fondo. En la segunda sala nos esperan un conjunto también de cinco piezas muy diferentes entre sí. Voy preguntando por cada una de ellas, intentando así acompañar de cerca el viaje de Clara.
Explícame qué es esto, “Acuarela 3″….¿Es una escultura? ¿Se mueve? ¡Parece que se va a caer!
Da esa impresión, pero no, no se cae, aunque sí que lo coloqué en esa esquina para generar cierto estrés. Acuarela 3 es una escultura. Lleva un largo tubo, flexible y transparente, enrollado sobre la superficie. Dentro del tubo, un líquido la recorre, siempre en movimiento, bombeado por una bomba oculta. En sus anteriores encarnaciones, Acuarela 1 y 2, el líquido era negro. Ahora es transparente. Crea otro efecto: blanco sobre blanco. Además se está comportando de una forma que no esperaba, alineándose en geometrías escalonadas ¿ves? ¡mecánica de fluidos!
Es bastante hipnótico. Me enamora, es una pieza sencilla, tan icónica y blanca.
Parece sencilla por fuera, pero en realidad es muy compleja. Me costó mucho llegar a ella. Acuarela 1 es del 2007, la expuse en Vacio 9. Desde aquella primera, hice mil pruebas con diversos materiales. Su simplicidad es el resultado de años de investigación. Tu la ves tan sencilla, pero dentro del pilar blanco que la sostiene, oculta, hay toda una maquinaria: la bomba y una batería recargable, que la mantiene más de un mes en movimiento ¿Ves? ¡No hay cables! Solo una escultura.
Esta otra obra en vídeo, son tubos con tinta similares a Acuarela 2. Es como una versión en vídeo formada por distintas piezas en espejo, juntas forman un cuadro en movimiento. ¿Son el mismo vídeo replicado en digital? ¿O quizá… no?
No hay nada generado digitalmente, son dos vídeos diferentes, sin mas efectos que una inversión en uno de ellos. Las piezas estaban ahí de verdad, superpuestas y son todas distintas. ¿Ves estos detalles, aquí…? Las sombras, las imperfecciones. Me interesan las cosas que son idénticas pero que al ser dos hablan de vidas diferentes, de subjetividades diferentes.
En 2013 hice una pieza, las Quantumsisters que era dos esculturas iguales pero estaban separadas, para ser colocadas en dos lugares distintos, como en las partículas de quantum, unidas en la distancia, pero también tiene que ver con lo humano, los gemelos: uno tiene suerte y otro no, el que vence y el que no vence. También en solo objects de ARCO presenté ”2 (x,y,z)” una pareja de dos piezas iguales pero una tumbada y otra de pie. No hay opción mejor o peor, dos están siendo en el mundo de manera diferente. Destinos, subjetividades.
¿Y esta otra obra, “Dear”? Es totalmente distinta. Rosa.
Es una anécdota, siempre seguir las leyes del arte contemporáneo me parece aburrido y estoy inventando truquitos para salir de eso sin prejuicios. “Dear” es una serie de cartas de amor a artistas reconocidos.
Esta de aquí es “Dear Wim Delvoye” Wim Delvoye es un artista belga. En su web hay una sección de Early works , que son dibujos de cuando tenía tres años. Así que yo le he dedicado un dibujo de cuando era pequeña. Me parapeto en excusas de otros pero en realidad me interesa recuperar la parte de juego, tengo otra serie Chosen, unchosen and imposible sculptures donde escojo formas y colores, procedimientos, para producir esculturas, teniendo como único fin el juego, el experimento.
También esta de aquí (señala un gran óleo abstracto en blanco y negro) tiene algo de juego. Es un monotipo de óleo y agua: lo fluido y el presente. Todo habla del tiempo, pero de una manera muy amplia.
Me concentro un montón en trabajar en unas piezas y en otras me salto mis propias leyes. Me apetece ser conceptual minimalista pero también que entren el dibujo y el color en mi producción.
Esta es la quinta pieza de la sala Teodolito ¿Que es un Teodolito?
Los topógrafos usan los teodolitos para medir el suelo, a fin de saber dónde estás en el paisaje. Arriba he puesto esta piedra de pirita, es el oro de los tontos, para mi la curiosidad.
¿En conjunto esta segunda sala sería como una sala de juegos, un cuarto de jugar?
Algo sí. Todas mis obras son juegos. Están muy serias y bien colocadas, pero son juegos. Si no el Arte lo siento como muerto.
Cuando hablas me parece percibir una dinámica entre placer y deber.
Me apetece pensar mucho a nivel de retos pero también cuidar la parte placentera a nivel de arte. No creo que una cosa conceptual tenga que ser sobria estéticamente, blanco y negro o gris. Juega con arte conceptual rosa o azul o lo que quieras…
Hay mucha escuela de do & dont’s. Yo he pasado por escuelas muy diferentes y eso me es útil. Veo los grupos de pensamiento a que pertenece la gente, hay muchas capas de política. Dentro del mundo conceptual todo lo que no se pueda verbalizar con palabras tiene tendencia a ser descartado, empujado a un lado. Y aunque el arte tiene una parte de pensamiento, también la tiene de cariño o de belleza-aunque sea de belleza fea- . Esta parte me parece parte del alma del arte. Los colores, los dibujos…. El mundo del pensamiento es en teoría más espartano en la estética, parece exigirnos ser sobrios. No me apetece regirme del todo por eso. Tener que justificar por qué azul ¿Por qué estos colores? ¡Porque sí!. (Pero también lo soluciono hablando de Sonia Delaunay y Rothko)
Quería preguntarte por tu interés por la tecnología y la ciencia, no es habitual tanta presencia tecnológica en el arte.
Experimentos, tecnología y ciencia me gustan. Se me dan bien las matemáticas y la física, no me parecen una cosa fría y seria. Me gusta cuando la ciencia se une con el día a día. Por ejemplo Musk, el de Tesla Motors que diseña coches eléctricos con una batería de Tesla. La ciencia sabe mirar el mundo de forma diferente.
¿Y cómo es recibida toda esta tecnología en la obra de una artista, una mujer? ¿Consideran que haces un arte femenino?
No, porque hago máquinas. Me cuesta que la gente se crea que las hago yo. Siempre lo tengo que especificar. De hecho, si se me ocurre trabajar con hombres la gente sobreentiende que lo han hecho todo ellos, es muy alucinante. Si haces algo muy complejo la gente no se lo cree “No, esto no lo has hecho tu” y aunque lo repita varias veces parece que no cala.
Lo acaba de decir la propia Bjork: Siendo mujer tiene la sensación de tener que decir cinco veces lo que a otros les basta decir una.
¿Las mujeres artistas siguen estando en tanta desventaja?
Si te pones a contar, las proporciones son horribles. Intento no ir a galerías donde soy una minoría étnica. Muchas veces no voy a inauguraciones por ese motivo.
Ahora presto mas atención a los lugares mas equitativos, como Helga de Alvear o Juana de Aizpuru.
Es un asunto histórico de Invisibilidad. Muchas veces me comentan que no ha habido mujeres artistas en la historia del arte. Respondo con el ejemplo de Sofonisba Anguissola. Un comisario de un monográfico de El Greco me comentaba que Sofonisba es casi con toda seguridad autora del cuadro que le dio la fama a El Greco entre los románticos, y le puso en el lugar que ocupa hoy, La dama del armiño. Pero las dudas sobre esta autoría se ocultan. De hecho, Sofonisba tiene otros cuadros en El Prado atribuidos a autores masculinos.
Como me concierne, llevo tiempo pensando sobre el asunto. A veces me ahoga pero otras pienso que esta todo por hacer…todo por conquistar. Ni siquiera tenemos generación del 27, lo bueno de no tener historia es que podemos escribirla ahora.
¿Y cómo se comportan las propias mujeres del mundo del arte?
Me han ayudado mucho mujeres. Elena Vozmediano, Mona hatoum, Maria y Lorena de Corral, Marta Cervera, Marta Moriarty. Yo también lo hago, si tengo que elegir prefiero recomendar a una buena artista. En definitiva creo que en una situación así las mujeres podemos ayudarnos. Hay un problema y esta es una posible solución. Aunque no la única. No quiero repetir las mismas injusticias y generar bandos…en definitiva me gusta ayudar a la gente íntegra y de valía.
La solución a veces esta en pensar en los otros. ¿Que no te reconocen como mujer artista? ¿Que te cuesta más? Piensa… ¿Conoces tú misma tu historia? ¡Dime 10 pintoras, 10 escultoras, 10 escritoras, 10 compositoras, 10 inventoras, 10 deportistas…! La mejor manera de acabar con los prejuicios es identificando los propios.
Todavía no me sé mis sesenta mujeres, pero aquí os dejo 10: Sofonisba Anguissola, Artemisia Gentileschi, La Roldana, Clara Peeters, Clara Wieck Schumann, Natalia Sergéyevna Goncharova, Meriam Bousselmi, Ada Lovelace, Edurne Pasaban, Catherine Destivelle.
SINNI se expone en Slowtrack hasta el 28 de Marzo del 2015
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