Entrevista a PLAT.TV

En La playa de Madrid queríamos entrevistar a los artífices de PLAT.TV, Beatriz Navas y Víctor Berlin, para conocer cómo nació la idea, en respuesta a qué, cómo fue tomando forma, de qué modo se materializó, cuáles son sus rasgos definitorios y hacia dónde se dirige. También para mostrar qué soluciones se están ofreciendo desde lo colectivo a las distintas manifestaciones de la decadencia y hundimiento de España. A las sardinas de esta playa nos gustan los proyectos que responden a esa máxima que hemos mencionado en otras ocasiones:
“frente a la evidencia de la catástrofe, están los que se indignan y los que toman nota, los que denuncian y los que se organizan. Estamos del lado de los que se organizan“.

- ¿Cómo se gestó PLAT?

Desde que fundamos Kinora (Asociación para la investigación, difusión e investigación audiovisual) en enero de 2009 ya había una idea de cómo convertirnos en argamasa para poner en contacto a profesionales y cineastas y abordar el cine desde una óptica lo más amplia posible: comisariado de ciclos, talleres, participación en producciones independientes, etc…

Es divertido pensar que Kinora es la madre y PLAT es su hija, el primer proyecto innovador y de envergadura de la asociación. En PLAT hemos conseguido, con la ayuda de los autores, que cristalizaran los objetivos que nos marcamos cuando fundamos la asociación. Han sido casi cuatro años de aprendizaje, trabajo y exploración de nuevos caminos, en los que nos hemos enfrentado al complejo proceso de dar forma a las ideas.

De hecho podríamos afirmar que si no hubiéramos fundado Kinora bajo los principios que nos marcamos, ahora no existiría PLAT. Son dos partes de un mismo proceso, que aborda el fenómeno cinematográfico desde una óptica integradora. Un proceso que no termina con el lanzamiento y la consolidación de PLAT, si no que sigue en marcha y que seguirá dando frutos (ricos frutos) a lo largo de los próximos años, aunque ahora no sepamos ni cómo se llamarán :p

Para nosotros fue importante el Festival EnPiezas 2011, que se celebró en La Casa Encendida, allí entramos en contacto con numerosos autores y constatamos que había una sensación generalizada de derrotismo y desánimo, a pesar de que en muchos casos se habían conseguido selecciones y premios en festivales de prestigio. Fue durante esos meses cuando comenzamos a mantener reuniones periódicas con autores, críticos y amantes del cine. Esto fue durante el primer semestre de 2011. Las ganas de cambio y de emprender desde la colectividad estaban en el aire, nosotros sólo pusimos los molinos en la dirección en la que soplaba el viento…

 

 

- ¿Se parece vuestra idea original a la forma actual de PLAT?

Fue complejo dar una forma concreta a todas las ideas que recogimos durante aquellos encuentros con cineastas, pero siempre tuvimos claro un elemento clave: teníamos que simplificar y entorpecer lo mínimo la experiencia del usuario del portal de modo que con tan sólo un par de clicks pudiera estar viendo una película sin ningún tipo de barrera.

Ahora nos parece muy divertido comparar los primeros diseños con hicimos con el resultado final, porque después de darle muchas, pero que muchas vueltas al tema, nos mantuvimos completamente fieles a la idea inicial. De hecho, PLAT está en su fase de arranque, todavía tenemos que implementar muchas funcionalidades que están pensadas desde el principio, pero que abordaremos de manera escalonada.

Tenemos un soporte informático muy flexible y muy fácil de gestionar de ahí que siempre estemos dando forma a nuevas ideas que surgen por en el camino mientras trabajamos. Por eso es sólo cuestión de tiempo que consigamos adaptarnos mejor a las necesidades de los usuarios y por lo tanto prestar un servicio mejor tanto para los autores como ellos.

Pero también tenemos que ser realistas en este proceso e ir paso a paso y sin complejos, consolidando nuestra oferta actual y nuestros objetivos iniciales antes de emprender nuevos retos.

- PLAT como plataforma on-line.

Desde el principio consideramos que si utilizábamos Internet debíamos ser capaces de poner a favor del proyecto todo el potencial que ofrece la Red, potencial que en muchos casos es mermado de manera artificial por las empresas. Internet no es una amenaza sino una herramienta de la que hay que aprovechar todas sus potencialidades. Si por algo se caracteriza Internet como medio es que ofrece la posibilidad de interactuar y de establecer comunicaciones bidireccionales con tus usuarios. Como además no somos intermediarios de los autores, pensamos que era fundamental que los usuarios pudieran abordar al autor de una obra o que un festival pudiera programar la obra de un autor sin pasar por otros filtros.

Al ser un Archivo fílmico online con vocación de permanencia y en continua expansión, es básico disponer de un potente motor de búsqueda y clasificación de las obras. En la página principal hay un completo buscador en el que puedes buscar por autor, por año de producción, por etiquetas, por duración y hay también un campo para la búsqueda libre. Lo mejor de todo es que las categorías de búsqueda se pueden cruzar entre sí.

- ¿Cómo se han ido uniendo nuevos directores a PLAT?

A lo largo de dos años, mientras gestábamos y definíamos el proyecto contactamos con numerosos autores para constatar sus problemas comunes e intentar darles una solución desde la colectividad. De ahí que tengamos un relación completamente horizontal con ellos.

Muchas de las dudas que tenían sobre el proyecto se despejaron cuando por fin pudimos lanzarlo en abierto y descubrieron su verdadero potencial y su capacidad de crecimiento exponencial, más allá de las ideas y las palabras.

PLAT es un proyecto sencillo, sólido y transparente. Un proyecto que hemos conseguido desarrollar sin recurrir a subvenciones o contenidos publicitarios. Esta independencia financiera unida a nuestra trayectoria profesional y nuestra total implicación con este tipo de cine (en algunos casos también participamos en la realización de las películas), aporta confianza a los autores que se convierten en miembros de la plataforma.

Además, el proceso de participación es muy sencillo y totalmente flexible, lo que nos permite adaptarnos a las necesidades de cada autor, que en todo momento escoge cuáles de sus obras desea que estén en la plataforma. Nosotros nos encargamos de gestionar con mimo estos contenidos y darles toda la visibilidad de la que somos capaces.

Hace tiempo que estamos trabajando en una convocatoria abierta para todo tipo de autores que quieran formar parte de PLAT y que todavía no conozcamos. Apenas hemos recibido negativas, porque los autores que forman parte de PLAT han participado en la fase de ideación o ya tenían parte de su obra colgada en Internet y les atraía la idea de unirse a otros, o consideraban que ya estaba amortizada por lo menos artísticamente o les interesaba testear vías nuevas y ver qué resultados daba.

- ¿Qué tal están funcionando los talleres con los directores?

A principios de mayo hemos tenido nuestra primera experiencia con dos talleres completamente diferentes entre sí. Por un lado el taller de Pablo Maqueda, impulsor del exitoso #Littlescretfilm, “Nuevos modelos, nuevos caminos”, en el que se abordaron las nuevas formas de distribución. Y por otro el taller de Sergio Candel, “Cómo hacer una película y no morir en el intento”, en el que Sergio ha compartido con los asistentes su dilatada trayectoria dentro de la producción y la dirección de largometrajes.

Los asistentes a los talleres han quedado muy satisfechos con el desarrollo de los mismos, sobre todo con el trato cercano y personalizado de los tutores. Por su parte los autores cuentan con experiencias pedagógicas previas. Nosotros lo que les ofrecemos es la posibilidad de que ofrezcan ellos su propio taller y lo diseñen desde cero, con una flexiblidad mucho mayor que la que ofrecen las instituciones culturales y sin tener que esperar hasta que estas se pongan en contacto con ellos.

De modo que a partir de octubre con seguridad contaremos con una segunda edición de los talleres citados y con otros de nuevos autores en los que ya estamos trabajando.

- ¿Se ponen en contacto los espectadores con los directores a través de PLAT?

Llevamos un par de meses en abierto y creemos que todavía los usuarios están aprendiendo a manejarse dentro del portal. De hecho, aunque la mayoría de obras pueden comentarse libremente, son pocos los usuarios que lo han hecho. De ahí que poco a poco, incorporaremos nuevas funcionalidades que permitan ampliar el feedback de PLAT y generar una comunidad de usuarios activa.

- ¿Qué acogida ha recibido el modelo de PLAT?

Para nuestra sorpresa el modelo que hemos propuesto basado en el libre acceso y la abundancia y gratuidad de contenidos ha sido aceptado de manera muy positiva tanto por parte de los medios de comunicación, como por parte de los autores y los usuarios de Internet; estas características eran una apuesta fundamental, pero no sabíamos exactamente cuál iba a ser la reacción. Hay que recordar que la cultura libre cuenta con una gran oposición y numerosos detractores.

Sin embargo, creemos que la existencia de PLAT se ha asumido como algo natural dentro de un entorno en el que hay mucho nivel de innovación. Para nosotros esto demuestra un alto grado de madurez dentro de la industria de los contenidos y su asimilación de los nuevos discursos digitales. De ahí que hayamos recibido el apoyo explícito de otras plataformas decanas en esto de servir contenidos audiovisuales a través de Internet como Filmotech y Filmin, o de portales más jóvenes como VenusPlutón! o Márgenes. Al fin y al cabo, desde diferentes trincheras, todos compartimos una lucha común.

- ¿Dónde se ve PLAT?

No podemos saber si la gente lo ve en el metro o en el bus, pero desde luego que tecnológicamente pueden porque todos nuestros contenidos están disponibles para la mayoría de dispositivos móviles, tablets y televisores con acceso a Internet. Y desde cualquier lugar del mundo.

Por otro lado, todo lo que se mueve en Internet es monitoreado en tiempo real y nos permite saber que propuestas son las que mejor están funcionando. Hasta el momento la mayoría de accesos, en torno al 75% se producen desde España y poco a poco se va despertando más interés en Latinoamérica, donde la penetración es menor, o en EE.UU. donde algunas universidades ya han indexado nuestro portal en sus bibliotecas, a pesar de que de momento solo está disponible en castellano. Confiamos en que estas cifras evolucionarán cuando lancemos la versión bilingüe en castellano y en inglés. Será entonces cuando podremos comprobar el verdadero potencial de difusión de PLAT.

- ¿Alojaréis la obra de directores extranjeros?

Actualmente nos dedicamos a alojar la obra de cineastas españoles, que estén afincados en España o cuya obra se desarrolle aquí. Creemos que hay mucho campo para trabajar en este terreno, de ahí que no queramos dispersarnos ampliando el espectro de países. Es un poco como el dicho, “quien mucho abarca, poco aprieta”. Además, la realidad que conocemos es la nuestra. Sería inútil intentar ponernos en la piel de los cineastas de otros países puesto que cada cinematografía nacional sufre su propia evolución y condicionantes.

De ahí que para nosotros la idea inicial es que este modelo que planteamos en PLAT sirva de inspiración para que se desarrollen plataformas similares en otros países, con las que podamos colaborar y tejer una red de plataformas independientes basadas en el libre acceso en todo el mundo.

En cuanto a lugares del mundo, contamos con visitas de toda Europa y el continente americano con Argentina a la cabeza, seguida por Colombia, Perú y Brasil. En cuanto a número de visitas son menos numerosas desde Asia o desde África, aunque contamos con muchos visionados desde China, la India, Mauritana o Sudáfrica.

- ¿Qué datos estadísticos de PLAT os han llamado más la atención?

Han sido muchos, sería difícil enumerarlos porque estamos constantemente intentando aprender de ellos. Nos ha sorprendido mucho la aceptación que tienen los cortometrajes, que superan en muchos casos a los largometrajes en cuanto a número de visionados completos.

También nos ha sorprendido gratamente la experiencia que tuvimos de estrenar en Internet, durante un solo fin de semana, la película de Carmen Latorre y Samuel Alarcón, “4,5 5,1 Crónica íntima de un terremoto”, en coincidencia con el segundo aniversario de los terremotos de Lorca.

Aunque lo que más nos gusta comprobar es cómo se dispara la demanda de películas cuando hace mal tiempo. Es muy divertido comprobarlo, puesto que estos son los días que tenemos un mayor tráfico de visitantes dentro del portal. Si tenemos en cuenta que lanzamos la página en primavera, todavía tendremos que esperar al otoño y al invierno para poder apreciar todo el potencial de PLAT.

- ¿De qué forma están vuestros trabajos de investigación sobre Val del Omar y Herzog en Plat?

Para nosotros Val del Omar es un referente tanto a nivel de independencia artística como a nivel personal por eso su particular visión de la tecnología ha sido muy importante durante la fase de desarrollo de PLAT. De hecho, nos gusta pensar que dado que el verdadero laboratorio de Val del Omar se desmanteló de manera definitiva durante el verano 2010, ahora ha encontrado un cierto tipo de continuidad en Internet.

Por otro lado, Werner Herzog es un espíritu indómito que ha superado cualquier obstáculo para sacar adelante sus más de cincuenta proyectos tanto en el campo de la ficción como de la no ficción, aunque él prefiera no hacer esta distinción y hablar de películas. Un ejemplo de cineasta independiente, comprometido consigo mismo que nunca ha sucumbido a convenciones, modas o crisis.

- Además de la ingente cantidad de trabajo y de los nuevos contactos en vuestras agendas, ¿cómo ha cambiado PLAT vuestras vidas?

Es una buena pregunta. Las ha complicado bastante, pero para bien, puesto que prácticamente cada día recibimos buenas noticias sobre PLAT. Se han confirmado intuiciones sobre las que llevábamos un par de años trabajando, así que desde este punto de vista, es una liberación.

Pero sólo llevamos un par de meses en activo y todavía no nos ha dado tiempo a reflexionar sobre ello…, el volumen de trabajo nos impide tomar perspectiva. A ver si a lo largo de este verano conseguimos recargar un poco las baterías y emprender la nueva temporada con ideas y propuestas nuevas.